Marimar
es una telenovela mexicana
producida por Televisa en 1994 y protagonizada por
Thalía, Eduardo Capetillo y
de antagónica Chantal Andere. Es la segunda telenovela de La trilogía de las
Marías.
Obteniendo premios en 1995 en TVyNovelas como telenovela de mayor rating, ACE, Heraldo de México y Eres a la
mejor actriz con
Thalía, Premio Eres y la nominación en Premios TVyNovelas a la mejor actriz
protagónica y varias nominaciones en los premios TVyNovelas de ese año.
La historia se trata de Marimar es una joven inocente que vive con sus
abuelos Doña Cruz y Don Pancho en una choza en la playa, en el pueblo de San
Martín de la Costa. Son muy pobres y a veces Marimar tiene que ir a robar para
darles de comer. Los abuelos le guardan un gran secreto: es fruto del amor de
su hija Lupita Pérez, y de Gustavo Aldama, un próspero hombre de negocios,
dueño del club privado
Grupo Aldama, más adelante llamado
Club Valle
Encantado.
Un día se encuentra necesitada y va a la Hacienda Satibañez para robar unas
verduras y huevos para que sus abuelos no mueran de hambre, pero Nicandro, el
capataz de la hacienda la descubre. Este malechor decide aprovecharse de ella;
le dice que puede tomar las verduras si ella le da un beso. Ella resiste y sus
gritos trae corriendo a Sergio Santibáñez, el hijo consentido de la casa
grande. Sergio la protege y le dice que debajo de toda su mugre, ella es
"bella". Marimar se enamora de él en ese mismo instante.
Cuando Sergio quiere desquitarse con su familia porque no quieren darle su
parte de la herencia y lo piden que siente cabeza, el concibe un plan para
casarse con "la mugrosa de la playa" y así humillarlos. Marimar,
deslumbrada, acepta casarse con Sergio y cae en su red. Ella ignora que su
padre la está buscando para convertirla en su heredera. Tiempo atrás, Gustavo
abandonó a su madre por ser de diferentes clases sociales, motivo por el cual
ahora vive atormentado y agonizante al no saber qué fue de su hija al morir
Lupita.
Marimar, ahora esposa de Sergio, sufre de humillaciones y desprecios por
parte de la familia Santibáñez, especialmente de Angélica -madrastra de Sergio
y esposa de Renato Santibáñez, y de su hermana Antonieta. Además, ésta última,
al frecuentar la hacienda, comienza a sentirse atraída por Chuy, uno de los
obreros de Renato. Posteriormente Marimar queda embarazada de Sergio, y huye
con sus abuelos al cansarse de lo que le hacen vivir las hermanas. Angélica
idea un plan para desterrar a Marimar para siempre: la visita a caballo y le
lanza a un charco de lodo, una pulsera que aparentemente había pertenecido a la
madre de Sergio, y le dice que será toda suya si la recoge del fango con los
dientes, Marimar lo hace y se queda con la alhaja. Después, Angélica y
Antonieta le regalan más joyas a Marimar para posteriormente acusarla de robo y
enviarla a la cárcel. Días después, y no conforme con el resultado, Angélica
escribe una carta para Marimar firmada aparentemente por Sergio diciéndole que
nunca la amó y exigiéndole que se olvide de él, aprovechándose de su ignorancia
y de no saber leer; Marimar se cree todo al escuchar la carta, leída por La
Cucaracha, su compañera de celda. Realmente lo que pretendía Sergio, era juntar
dinero para vivir con ella apartados de su familia, y para lograr esto, entró a
un equipo de fútbol y tuvo qué dejar una temporada San Martín de la Costa;
mientras estuvo fuera, Angélica hacía todo esto. A tal grado llegó el afán de
fastidiar a Marimar, que Angélica envió a Nicandro el capataz a prenderle fuego
a la choza de los abuelos de Marimar, donde ambos mueren quemados; en ese mismo
momento, Marimar sueña con ellos y tiene el presentimiento que algo está mal.
Antonieta, al enterarse de tal atrocidad, le da la espalda a Angélica y decide
no seguir apoyándola en sus planes, al igual que Renato, mismo que comienza a
despreciar a Angélica por el mismo motivo.
Angélica va a visitar a Marimar y le informa que sus abuelos han muerto, lo
que la deja deshecha. Le dice que retirará la denuncia pero le exige que se
vaya lejos del pueblo. Marimar sale de la cárcel y visita a sus abuelos en su
última morada. Decide irse de San Martín de la Costa rumbo a México, y la
acompaña el Padre Porres. Justo en esos momentos, Gustavo Aldama, padre de
Marimar, envía un investigador a San Martín y da con el paradero de su hija. El
investigador va y busca a Selva, la cantinera y gitana del pueblo, misma que es
la única que sabe la verdad de Marimar. Lamentablemente cuando Selva llega a la
terminal, Marimar y el padre Porres ya van en camino a México.
Marimar, ya en la capital, se hospeda en una casa de asistencia propiedad de
Doña Josefina, y consigue trabajo de sirvienta nada menos que en la casa de su
propio padre sin saberlo. Al principio Gustavo no la reconoce debido a que
Marimar se ha cambiado el nombre a Bella. Después de algún tiempo, Gustavo y
Esperanza, la tía de éste, le ofrecen quedarse en la mansión. Al principio la
tratan como una trabajadora más, pero en una ocasión que Esperanza, al
inspeccionar las cosas de Bella, descubre que es en realidad Marimar, cambia
totalmente el trato hacia ella; Gustavo decide hacerse cargo de Bella y
comienza a refinarla, apoyado por Esperanza. Bella ha perdido el interés de
buscar a su padre por enterarse que abandonó a su madre, y un día Esperanza le
dice quién es en realidad. Sin embargo deciden callar ante Gustavo, mismo que
comienza a tener problemas cardiacos cada vez más severos.
Gustavo comienza a sospechar que su apoderado Bernardo Duarte, socio suyo en
el Club Valle Encantado, está haciendo malos manejos en el casino, de manera
que decide enviar a Bella como su representante, bajo el amparo de su apellido.
Bella encuentra infinidad de irregularidades, como por ejemplo el hecho de que
Bernardo envía ladrones a despojar de sus pertenencias a los socios, todo con
la finalidad de hacerle creer a Gustavo que hay pérdidas en vez de ganancias y
que éste le ceda su parte para quedar como dueño único. Durante su estancia en
Valle Encantado, Bella conoce a un opulento hombre de negocios llamado Rodolfo
San Genís, quien queda prendado instantáneamente de su belleza y con el paso
del tiempo, su amor se convierte en obsesión dado a las negativas de Bella.
Mientras tanto, Sergio regresa a San Martín de la Costa y se encuentra con
que Marimar ha abandonado el pueblo y se entera de lo que les sucedió a Doña
Cruz y Don Pancho, y se molesta con sus padres por no decirle la verdad, pero
al mismo tiempo se siente culpable de haber abandonado a Marimar. Después se
regresa a Ciudad de México.
Bernardo decide convencer a Gustavo para que le ceda su parte de Valle
Encantado aprovechándose de su cada vez más deteriorada salud, y cuando está a
punto de firmar, Bella aparece y revela su verdadera identidad a su padre. Esto
ocasiona que Gustavo caiga enfermo, cosa que no detiene a Bernardo en su afán
de poder, mismo que lo va a ver al hospital para seguir con su labor de
convencimiento. El día de la cita para firmar, Gustavo muere de un infarto en
el hospital, dejando a Marimar como su legítima heredera y dueña del Club Valle
Encantado, según lo estipulado en su testamento. Mientras tanto, un compañero
futbolista de Sergio también muere, y ambos coinciden en la sala de velación.
Sergio al instante la reconoce y le pregunta si es Marimar y ella se niega
diciendo que se llama Bella Aldama, Marimar al verlo se le revive todo el amor
que ha sentido por el, pero a la vez los deseos de venganza por haberse burlado
de ella.
Después de tan amargo episodio, Marimar conoce al gobernador de Valle
Encantado, Fernando Montenegro, quien a pesar de su avanzada edad se enamora de
ella y se convierte en su protector a costa de los celos de su hija Natalia,
quien desde hace ya un tiempo ha querido que su padre se case con su amiga
Isabel, y estos celos se agudizan aún más cuando Natalia comienza a ser novia
de Sergio y se entera del pasado que tuvo con Marimar.
Sergio comienza a frecuentar Valle Encantado, mismo del que Marimar es
dueña, luego Sergio se trae a vivir a Valle Encantado a su padre Renato y a su
madrastra Angélica, que también al ver a Marimar quedan impactados por su gran
cambio, Marimar al verlos se les llena más su corazón de venganza al ver las
tres personas que más la habían hecho sufrir, entonces Marimar en complicidad
con una empleada hacen que Renato se vuelva adicto a los juegos al punto de
hipotecarle a Marimar la Hacienda Santibañez y perderla.
Ya vengándose Marimar de Renato, le falta vengarse de la malvada Angélica,
entonces un día Marimar le dice a Angélica que si quiere recuperar la hacienda
la espere ese mismo día en la tarde en el jardín de Valle Encantado, mientras
Marimar manda a un empleado a que haga un hueco lleno de lodo, Marimar cita a
Renato, a Sergio, a su novia Natalia y a varios empleados de Valle Encantado y
obviamente a la perversa Angélica, entonces Marimar toma una copia de la
escritura de la Hacienda Santibañez y la rompe en varios pedazos y los hunde en
el lodo, y con una lágrima en su mejilla recuerda las palabras que le dijo
Angélica al hacerle sacar la pulsera por la que la metieron a la cárcel,
Marimar hace que Angélica se arrodille y mostrándole el charco de lodo le
pregunta que a qué le recordaba eso, todos ignoran de que le habla Marimar a
Angélica, entonces Marimar le dice las mismas palabras que le dijo ella, y como
así Angélica la obligó a sacar la pulsera Marimar la obliga también a sacar los
papeles de la escritura con los dientes. Sergio y su novia se marchan para no
ver el espectáculo, y Renato se queda llorando de impotencia al no poder hacer
nada, y humillada, a la malvada Angélica no le queda otro remedio que sacar la
escritura del fango con los dientes, luego Marimar sale corriendo llorando al
verse que se había vuelto en una mujer vengativa y cruel. De cualquier manera,
Marimar adquiere la propiedad de la Hacienda Santibáñez, que renombra ahora
como Hacienda Los Abuelos, y después de algunas negociaciones y malos
entendidos por parte de Natalia que soborna a un funcionario para hacer que
Marimar deje Valle Encantado, le cede sus acciones del club a Rodolfo San Genís
y regresa a San Martín de la Costa.
Días después, cuando Angélica sale de compras y se regresa a Valle Encantado
en un taxi, éste se estrella al desviar un camión y Angélica queda atrapada en
el taxi cuando está en llamas, con fuego encima sale del carro pidiendo ayuda,
y así como murieron los abuelitos de Marimar por orden de ella, ella también
muere completamente calcinada en el hospital, pero sin ningún dejó de
arrepentimiento por todo el daño que hizo y no sin antes maldecir a Marimar.
Renato, a su lado viendo el atroz destino que sufrió su esposa y lleno de ira
jura que se vengará de Marimar. Ésta ya con su hija Crucita decide reconstruir
allí su vida y ayudar al pueblo que la vio crecer, a su vez, Sergio ya separado
de Natalia porque no la ama también regresa y su amor por Marimar no se ha
apagado. Tiempo atrás, antes de conocer a Marimar, Angélica trató de convencer
a Sergio para que se casara con la hacendada Inocencia del Castillo y Corcuera,
misma que por su apariencia desarreglada no llama la atención de los hombres;
ésta, al saber solo a Sergio, viaja a Valle Encantado y cambia su imagen, ahora
sofisticada y elegante, y poco tiempo después se casa con él.
Marimar entonces decide jugar con Sergio y causa la ira de Inocencia, quien
trata a toda costa de retener al hombre que ama, pero todo es en vano. Algún
tiempo después, Inocencia es atacada por un tumor canceroso en el cerebro, lo
que ocasiona que Sergio le dedique más tiempo, el mismo que estaba tomando para
tratar de reconquistar a Marimar, la que está teniendo una serie de problemas,
pues está siendo engañada por los pobladores de San Martín de la Costa, a
quienes ayudó de manera altruista, debido a que están robándole en vez de
responderle según lo pactado por ella, y lamentablemente quien más la está
defraudando es Chuy.
Algún tiempo después, llegan dos ingenieros a la Hacienda Los Abuelos y le
anuncian a Marimar que debajo de la hacienda existen yacimientos petroleros y
requieren expropiar la finca. Uno de los ingenieros es Adrián Rosales, quien se
enamora de Marimar al instante, y ambos comienzan a tener afinidad y
convivencia. Este le propone matrimonio, y Marimar al principio lo acepta;
estando ya por hacer los preparativos, aparece Sergio para suplicarle a Marimar
que no se case, y entonces ella le reprocha lo de la carta que le envió estando
en la cárcel mostrándosela; Sergio le dice que él no la escribió y le muestra
su verdadera firma, y ambos coinciden que Angélica fue la autora de la misiva.
Marimar le dice a Sergio que es demasiado tarde porque ahora está comprometida
con el Ing. Rosales. Sin embargo días después declina la proposición de Adrián
porque su amor hacia Sergio es aún más fuerte. Finalmente Inocencia es operada
exitosamente del tumor y está por regresar a su casa, y en esos momentos el
Padre Porres le dice a Sergio todo lo que Angélica hizo para separarlo de
Marimar; al enterarse de todo, va y la busca pero Marimar sigue en su negativa.
Justo ahí aparece Inocencia y le dice a Marimar que le dejará el camino libre con
Sergio, pues ya comprendió que no puede tener a un hombre a su lado si no la
ama, y Renato aprovecha también para disculparse con Marimar. Esta recibe una
carta de la Ciudad de México, indicándole que sus negocios han prosperado más
de lo previsto.
Una vez divorciado de Inocencia, Sergio se casa con Marimar en la Capilla de
San Martín y se van a vivir a la Mansión Aldama.